Neoplasia (neoplasm, neoplasia), término que hemos importado del francés (néoplasie) que significa «tejido de nueva formación», se utiliza para designar a toda esta familia de enfermedades. Las células de este tipo son neoplásicas (neoplastic). Las hay benignas y malignas, pero cuando va sin adjetivo, casi siempre hace referencia a las malignas.
Tumor (tumour [UK], tumor [US]), que originalmente hacía referencia a cualquier bulto o hinchazón (tumefacción, tumoración), desde el siglo XX solo se emplea para una masa sólida de células. Cuando se trate de una masa benigna (tumor benigno), sería sinónimo de neoplasia benigna. Pero el tumor maligno no es sinónimo estricto de neoplasia maligna dado que, por ejemplo, una leucemia no es un tumor al no presentar masas sólidas. Las células de estas masas, benignas o malignas, son tumorales.
Carcinoma (carcinoma, carcinomata), del griego καρκίνωμα (karkínōma), hace referencia a las neoplasias malignas que se forman en los tejidos epiteliales (la gran mayoría). Sus células son carcinomatosas.
Sarcoma (sarcoma, sarcomata) es un término que deriva del griego σάρκωμα (sárkōma → crecimiento de la carne, tumor carnoso). Son las neoplasias malignas que se forman en un tejido conjuntivo (incluido el músculo que forma la carne), como el sarcoma de Rous. Las células de este tipo son sarcomatosas.
Cáncer (cancer), una palabra de origen latino (que a su ver procedía del término griego para «cangrejo») que acuñó Hipócrates, se usa cada vez más como sinónimo de neoplasia maligna (como se señalan Navarro y la Wikipedia). Al principio solo hacía referencia a las neoplasias epiteliales y era sinónimo de carcinoma, pero hoy el carcinoma es un tipo de cáncer. Este tipo de células son cancerosas (cancerous).
Teratoma (teratoma) que hemos tomado del latín y que procedía del griego τέρας, -ατος (téras, -atos → 'monstruo') y -oma → 'hinchazón', es un tumor de origen embrionario que se suele detectar en la edad adulta en forma de quiste. Muchos son benignos, pero los inmaduros sí que podrían ser malignos. Se consideran sinónimos cuyo uso se desaconseja disembrioma (dysembryoma), teratoblastoma, y tumor teratoide (teratoid).
Zaratán: derivado del árabe con el significado de cangrejo, empezó siendo sinónimo de cáncer y de carcinoma, para acabar haciendo referencia solo al cáncer de mama desde al menos 1739. Sin embargo, es muy poco probable que alguien utilice este precioso vocablo en nuestros días.